Todos nosotros estamos conformados, como en un buen retrato cubista, de facetas que nos configuran como un todo. En ocasiones una de estas facetas destaca sobre el resto y nos dota de un cierto halo de especialidad; en otras, es la armónica conjunción de todas las que configuran nuestra imagen hacia los demás.
En el ámbito profesional dos facetas son las que he tratado de compaginar con más o menos suerte: la labor docente y la labor investigadora. El devenir de los tiempos ha hecho que la primera sea la faceta que sustenta mi modo de vida y el de mi familia, la segunda se ha convertido en una especie de hobbie diletante que llena mis huecos y proporciona esa chispa que todos necesitamos para sentirnos un poco más vivos.

Compaginar las dos labores y además conciliar con la vida familiar es hoy por hoy en este país algo que roza lo imposible. Siempre una de la labores ha de resentirse de la imposibilidad de hacerlo todo a la vez y hacerlo bien… por desgracia hay que elegir y le tocó en suerte a la labor investigadora quedar relegada a la tercera opción. No son éstos buenos tiempos para la investigación, sólo hay que leer los titulares de prensa y buscar los datos estadísticos: miles de jóvenes sobradamente formados inician un exilio en busca de financiación para investigación que aquí no encuentran. Pasaron los años de la inversión en I+d+i.
¿Que es I+D+I?
I+D+I o lo que es lo mismo Investigación, desarrollo e innovación , es un nuevo concepto
adaptado a los estudios relacionados con el avance tecnológico e investigativo centrados en el avance de la sociedad, siendo una de las partes mas importantes dentro de las tecnologías informativas.
El desarrollo es un concepto que viene del sector económico, y la innovación e investigación vienen del la tecnología y la ciencia.
Mientras que el de desarrollo es un término proveniente del mundo de la economía, los de investigación e innovación provienen respectivamente del mundo de la ciencia y la tecnología, y su variable relación esta dentro del contexto de la diferencia entre ciencias puras y aplicadas siendo en cualquiera de los casos un compleja y extensa definición.Se ha definido la investigación como el hecho invertir capital con objeto de obtener conocimiento, siendo la innovación invertir conocimiento para obtener ese capital, lo que marca muy claramente la ecuación de retorno de ciertas inversiones en investigación que una vez se convierten en innovación reportan grandes beneficios a la parte inversora, siendo los país los principales canales tanto de inversión como de repercusión en el crecimiento.
El nivel de potencia en I+D+I en un país se suele medir por el ratio entre el inversión realizada en I+D+I el PIB, Separando claramente la inversión publica y privada en este área.Casi el total de los países intentan, en la medida de lo posible, incrementar su actividad en I+D+i a través de subvenciones, préstamos bonificados, deducciones, etc, ya que estas inversiones se ven directamente reflejadas en el nivel competitivo del tejido empresarial y productivo de dicho país. Todas estas mejoras se ven repercutidas socialmente en forma de mejora en la calidad de vida, salud, etc.
Plan Nacional i+d+i Investigación y desarrollo
Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2013-2016
[http://www.plannacionalidi.es/que-es-idi/]
El gran problema de estos planes nacionales es que están pensados fundamentalmente para labores entendidas como científicas y las Humanidades en general y la Historia del Arte en particular parecen escurrirse dentro de estas etiquetas y aunque algunas investigaciones artísticas han logrado financiarse mediante estos planes públicos, la inmensa mayoría de los mismos han de mendigar fuentes de financiación.
Toda esta reflexión viene a cuento de que este lunes 7 de marzo presentan un magnífico libro dos colegas y amigos: El inventario del Alcázar de Madrid de 1666. Felipe IV y su colección artística de Gloria Martínez Leiva y Ángel Rodríguez Rebollo.
Mi amistad y colaboración con Gloria, alma mater de mi otro gran proyecto difusor de conocimiento que es InvestigArt, ya es por todos conocida. No he sino afirmarme en todo lo dicho y añadir que además fue Gloria Martínez Leiva la persona con la que primero pisé un archivo: el Archivo General de Palacio en Madrid, trabajando con ella he conocido la emoción de encontrar un documento inédito e interesante y tratar subterfugiamente de hacernos con una pequeña reproducción fotográfica, estar horas uno frente a otro pasando legajos en muchas ocasiones insulsos y sin mucha información hasta que hayas el dato que buscabas…

A Ángel Rodríguez me une además de una amistad antigua, el hecho de ser compañero de clase en mis años universitarios y también haber descubierto con él obras de arte recónditas y poco conocidas. Me abrió las puertas a colecciones privadas y a piezas magníficas.

Los dos han realizado una enorme labor de investigación, localización, búsqueda y seguimiento de obras de arte que hoy no sólo pueblan uno de los grandes espacios expositivos mundiales: el Museo Nacional del Prado, sino que hay obras por otros grandes museos y colecciones.
Además su labor se ha visto supeditada a un grave problema de búsqueda de recursos, ya hicieron un primer libro fantástico: Quadros y otras cosas que tiene su majestad Felipe IV en este Álcazar de Madrid. Año de 1636. Editado en el año 2007 y que es un primer acercamiento a la disposición de las colecciones del Álcazar de Madrid al inicio del reinado de Felipe IV, es decir cómo hereda este rey su palacio. El libro actual es su complemento y superación.
Sus amigos sabemos de sus años intentando que su enorme y magnífico trabajo de investigación viera la luz en forma de libro. Por ese motivo me enorgullezco de saberme entre los que conocen la intrahistoria del mismo y también ser uno de los que el próximo lunes celebre con ello su puesta de largo. Enhorabuena y gracias.
#YoSoyDeInvestigArt